HISTORIA DE TITO FIGUEROA

Subo este mensaje que recibi por correo de una gran persona,donde cuenta su historia y realmente me emociono y por eso la comparta aca:

«Recibe mis mayores deseos de Paz y Bienestar para tu vida.

Espero que tus cosas estén marchando bien, sobretodo desde la premisa de SABER que
posees un inmenso Poder Interior, que viniste al mundo con el y que en todo caso
lo único que debes hacer es ¡ACTIVARLO a tu Favor!

Pero, ¿En que me baso yo para afirmar esta realidad en tu vida?

Permíteme en todo caso contarte un poco de mi ¿Quieres? Te prometo desde ya que no será
aburrido, pues no se si a ti te ha pasado, pero en mi vida han ocurrido hechos que
podríamos bautizar con el nombre de: ¡Misterios!

Así que esto NO se trata de hacerte una historia aburrida donde te menciono mi
síntesis curricular,etc. Sino los aspectos que fueron un “Gancho” para que yo me interesase
en la posibilidad de comprender este Poder, y a partir de ahí, compartirlo contigo en
diferentes formatos ¿Te gusta la idea?

Empiezo por aquí…
En el año 2006 pude conocer como en segundos nuestras vidas pueden cambiar de un solo
sopetón, y tocar el caos.

Un día, después de haberme sometido a una cantidad de exámenes médicos, motivado a que
mi orina era permanentemente de color café.
El Dr. Juan Sitga, sin un miligramo de anestesia pronunció palabras más, palabras menos algo así:

“Tu sangrado es debido a un fuerte engrosamiento en la pared posterior de la
vejiga. Esto es por la presencia de un tumor que por su densidad, su tamaño y su
ubicación, entiendo que es maligno pero esto lo determinaremos con una Biopsia”. “No
debes preocuparte, pues tenemos varias alternativas antes de llegar a la
quimioterapia inclusive. De hecho, podríamos sacar tu vejiga, y hacerte una a raíz del
intestino grueso. Claro, esto llevará un tratamiento etc. etc. Etc”.

Al salir de ahí, les juro que no atinaba que hacer… Me sentía un poco confundido y mi
mente divagaba sin parar en diferentes alternativas. Era como si voces del interior
me hablaran al mismo tiempo.

Así que opté por dos cosas a seguir:
La primera: No volver a ver a ese médico (Aunque me agradaba)

La segunda: Activar mi Fe para Sanarme (Tenía una idea de cómo hacerlo)

En honor a la verdad, desde pequeño me ocurrieron cosas muy extrañas. Muy
interesantes y que fueron un estímulo a que yo me adentrara en este mundo de lo
desconocido, lo esotérico, etc.

Así que armado con una profunda Fe inquebrantable, estuve haciendo
incesantemente ciertas dinámicas durante el día o durante la noche.

Una de estas, era al levantarme, me quedaba en cama una media hora adicional, sentado en
la misma repitiendo en mi mente, al principio casi susurrado

“Gracias Dios por sanarme la Vejiga. Amén”

Esto mismo hacía antes de dormir, calculo que 20 o 30 minutos hasta quedarme dormido

Durante el día, al manejar o realizar actividades propias de piloto automático
como bañarme, rasurarme, cepillarme, manejar mi auto, o al estar en una cola etc. Hacía
exactamente lo mismo mentalmente.

Recuerdo que a veces el miedo surgía en forma espontánea, pero el mismo luego
desparecía al yo repetir mi frase sin parar por un tiempo determinado (El miedo cedía…)

Por otro lado, cada vez que iba a tomar agua en mi casa, tomaba el vaso con mis manos
cerraba mis ojos, y utilizaba una técnica que muchísimos años atrás me había enseñado
un amigo puertorriqueño de nombre Carmelo López, que según el, servía para “Magnetizar
el Agua”

Hoy se que el ¡Tenía Razón!

Transcurrió el tiempo, y empecé a notar que mi orina cambiaba de color. Su aspecto poco
a poco fue aclarando y encontrándose con su matiz natural.

Así que un día, a escondidas de mi familia, me practiqué un examen de orina para
compararlo con los primeros, a ver que había pasado

Ese día, mi FE aún creció más.

¡Se empoderó!

La presencia de hemoglobina en mi sangre había casi desaparecido, y los hematíes que
en su momento eran incontables, ya habían bajado su presencia en un 90%

Esperé un par de semanas más, ya para este tiempo, tendría un mes y medio de practicar
mi terapia empírica. En aquella oportunidad, ya mi orina no mostraba rastros de sangre en
la misma. Así que procedí a realizarme un nuevo examen de sangre:

¡Mis niveles de urea y creatinina estaban normalizados!

Antes, eran alarmantes. Así que definitivamente, este era un buen motivo
para practicarme un nuevo eco para observar que pasaba en mi vejiga.

El resultado fue el siguiente:

Donde había un fuerte engrosamiento de la pared posterior de la vejiga, se encontraba
ahora una ligera laceración.

Esto me llenó de emoción como podrás imaginarte.

Sin embargo aún no conté nada a mi familia.
Dos o tres semanas después, ya mi vejiga estaba normal para mi alegría y la alegría
de todos los involucrados.

Ese día entendí varias cosas…

Uno: Todos tenemos un Poder Interior que al entrar en contacto con el, puede obrar
maravillas
Dos: La Autosugestión es un medio para entrar en contacto con este Poder.
Tres: No podía quedarme de brazos cruzados con esta situación

¡Algo debía hacer!

Tenía que investigar a profundidad el por que de esta remisión espontánea y a su vez,
crear o desarrollar herramientas que pudieran facilitarle a quienes no estuvieren
muy familiarizados con estos conocimientos, la concreción de una sanación.

Así, dos años despues de investigar, aprender, experimentar y validar mis
primeras percepciones, nació mi Audiolibro:

“Sánate con el Poder del Agua y el Poder de tu Pensamiento”

Este Audio me ha dado muchas gratificaciones, a juzgar por la cantidad de
testimonios que he recibido de quienes lo han utilizado.

Primeramente lo distribuí a nivel de tiendas holísticas, librerías locales, etc. Luego,
comprendí que así su distribución era muy limitada… ¡Tenía que hacer algo!

Fue cuando descubrí el poder de Internet.

Hoy, he desarrollado una herramienta que no solo sirve para activar mecanismos de
autosanación. Sino que la misma actúa en los ámbitos más importantes de la vida de un ser
humano.

Está herramienta basa parte de su poder en la Autosugestión, y a su vez en la sinergia
de varios recursos actuando simultáneamente.

Estos recursos los descubrí posterior a mi sanación, gracias a mis investigaciones.

Tu ya la conoces;-)

Si haces un uso disciplinado y comprometido de ella, tu vida podría cambiar para mejor.

Solo necesitas:

¡Determinación y Constancia!

Quise contarte un poco de mi, pues se que de pronto pueda inspirarte…

En días pasados, un conferencista a quien admiro mucho, de nombre Luis Ravizza,
compartió una conferencia sobre el Poder de las Palabras…

No sabes que gratificante fue para mi Fue una explicación sin desperdicio, refinada
y muy reveladora…

Y yo se que es VERDAD lo que dijo, pues lo viví Conozco el Poder de la Palabra

¡No dudes nunca de ese Poder!

Recibe mi cálido Abrazo Fraternal

Tito Figueroa
http://reprogramatumemnte.com